Monasterio Nuestra Señora del Soto

En 1608 se erige este convento de corte clasicista sobre antiguas edificaciones góticas y renacentistas. Su principal virtud son los retablos que acoge en su interior, un conjunto de estilo barroco entre el que destaca especialmente el retablo mayor, de finales del siglo XVII. El retablo mayor representa la imagen gótica de la patrona del valle de Toranzo, la virgen del Soto.

Los rasgos elementales de este convento fueron obra de arquitectos de renombre como Fray Lorenzo de Jorganes o Juan de Naveda.